Colapso en ruta D-43 y escaso transporte público afecta a sector de Pan de Azúcar

La congestión vial producida por los trabajos de mejoramiento que realiza el Ministerio Obras Públicas en la ruta D-43 que une a las comunas de Coquimbo y Ovalle, causa una molestia generalizada entre los pobladores de Pan de Azúcar y conductores que utilizan esta vía. Ellos deben atravesar a diario kilométricos “tacos” para llegar a destino, aumentando así los tiempos de traslado de vehículos y afectando el acceso de la locomoción pública al sector, lo cual, impacta de manera negativa en la calidad de vida de la propia comunidad.

Largas filas de automóviles son la tónica diaria y esperas por más de 1 hora para llegar a sus domicilios enfrentan los vecinos del sector rural de la comuna puerto y otras zonas, ante los cortes realizados en la ruta por la empresa Sacyr para renovar algunos tramos de pavimentos y mejorar aspectos de seguridad y vialidad. Sin embargo, también muchas personas realizan largas caminatas hasta el cruce La Cantera para poder optar a microbuses, ya que debido a los atochamientos decidieron trasladar la terminal hasta el Barrio Industrial de Tierras Blancas.

Cabe señalar que las obras en ejecución pertenecen al megaproyecto que contempla la doble vía de 56 kilómetros de ampliación a doble calzada, que partirá desde el Aeródromo Tuquí en Ovalle, hasta un baipás en la zona cercana a Pan de Azúcar, que haría atravesar esta arteria por la zona no poblada en beneficio de los habitantes de esta última localidad.

Testimonios

Diario El Día concurrió hasta la localidad de Pan de Azúcar, donde pudo evidenciar la molestia de la comunidad y automovilistas ante el colapso vial existente. En la oportunidad, se pudo dialogar con Juan Toro, presidente de la junta de vecinos Unión Venus, quien tildó de crítica la situación y llamó a las autoridades a dar solución a la falta de transporte público, y a acelerar los trabajos en la ruta D-43 para normalizar el tránsito vehicular.

“La empresa Sacyr se equivocó en realizar estos trabajos, ya que primero deberían haber terminado la nueva ruta, antes de intervenir la vía existente y que atraviesa a Pan de Azúcar. Por esto la empresa de microbuses abandonó el recorrido y dejó a la gente sin locomoción en las mañanas y en horas de la tarde. Esto está generando malestar en la comunidad, lo que en cualquier momento podría generar hechos de violencia o simplemente optar por tomarse la ruta”, advirtió Juan Toro, mientras dialogó con El Día.

El dirigente social también puso énfasis en que la población afectada por la problemática expuesta abarca igualmente a la localidad de Cerrillos, que junto a Pan de Azúcar, sobrepasan los 4 mil habitantes.

Posterior a dialogar con Juan Toro, se pudo conversar en medio de la congestión vial con molestos conductores que en su mayoría esperaban para trasladarse entre Coquimbo y Ovalle. Las impresiones fueron múltiples, pero en general indicaron que existe una mala programación en los cortes de tránsito realizados y la extensión de éstos.

“Prácticamente desde hace una semana es imposible transitar por esta ruta y las autoridades no consideran la existencia de alternativas para ingresar por otros sectores a Pan de Azúcar. Debieron planificar los trabajos de noche y no en el día; ya que miles de personas usamos esta vía para ir a nuestros hogares o trasladarnos hacia Ovalle. Es lamentable, cada día más de una hora perdida por la inoperancia de otros”, señaló Eric Pasten, molesto conductor.

Por su Parte, Omar Castillo, poblador de Pan de Azúcar, señaló que “lo que vivimos a diario acá es terrible. Nosotros debemos trasladarnos con nuestros productos todos los días hacia varios sectores, pero los trabajos en la ruta no lo permiten. No hubo una buena planificación y la comunidad tampoco fue bien informada. Ahora nosotros pagamos el precio de esto y nadie responde”, concluyó.

Solución del MOP

Como se señaló, los trabajos de mejoramiento en la ruta D-43 son mandatados por el Ministerio de Obras Públicas a la empresa Sacyr. A razón de ello, diario El Día concurrió a dialogar respecto a la problemática de congestión vial con la seremi del MOP, Mirtha Meléndez, quien reconoció los inconvenientes ocurridos, pero anunció medidas a la brevedad.

“Los trabajos en la ruta son obligados y la única forma de realizarlos es cortando la carretera, ya que al estar las casas cercanas a la vía es imposible hacer un baipás. Por ello, ya se acortaron los tramos y la empresa hará las obras de día y de noche para poder entregar el lunes. Llamo la calma a la comunidad, y pido mil disculpas por un millón beneficios”, consignó a El Día la seremi del MOP.

Meléndez detalló que la intervención era necesaria en la ruta D-43, para mejorar esta arteria altamente transitada y darle un mayor estándar, con más seguridad y conectividad. En ese sentido, además informó que se recomienda a los conductores preferir la ruta 5 para desplazarse hacia la comuna de Ovalle, lo cual es posible al ingresar por el sector de las Barrancas.

Por último, la titular del MOP, destacó los avances en la nueva ruta D-43 y que pasará por detrás de la zona poblada de Pan de Azúcar. Esta arteria permitirá reducir el tránsito por la vía que atraviesa a la localidad, la cual, se dotará finalmente de paraderos, enlaces, retornos y sectores de seguridad.

Compromisos en locomoción

Los problemas de disponibilidad en la locomoción pública mayor también fueron denunciados por la comunidad de Pan de Azúcar. Por ello, se quiso conocer las impresiones del gremio microbusero y las autoridades pertinentes.

Así, diario El Día accedió a dialogar con Óscar Muñoz, presidente de la empresa de microbuses Lincosur, quien admitió que debido a los trabajos efectuados en la ruta D-43, obligadamente se debió optar por trasladar el terminal desde Pan de Azúcar al sector del Barrio Industrial de Tierras Blancas. Esto, debido a los extensos tiempos de viajes y al impacto que esto genera en los normales recorridos por diferentes puntos de Coquimbo y La Serena. No obstante, descartó que el servicio prestado con antelación al inconveniente fuera deficiente.

“El seremi de Transportes estaba informado de los trabajos en la ruta que nos generaron problemas, y por lo cual debimos trasladar nuestras máquinas y personal, ya que tenemos que cumplir frecuencias y horarios. Nosotros hemos dialogado con dirigentes sociales y la situación ya se está normalizando. Esperamos que los trabajos concluyan entre el miércoles y jueves”, señaló el presidente de la empresa del transporte mayor Lincosur, Óscar Muñoz.

El seremi de Transportes y Telecomunicaciones, Óscar Pereira, manifestó que “nos reunimos con los representantes de Lincosur, quienes vieron afectada su labor con los trabajos de la vía, por lo cual, se tomaron medidas para modificar el inicio de los recorridos. El llamado es a la calma de la comunidad, ya que se están realizando gestiones por parte de Obras Públicas para terminar lo antes posible con las intervenciones”, señaló.

Pereira también informó que se está fiscalizando en la ruta D-43 para que la comunidad pueda contar con el servicio, y dejó en claro que está la disponibilidad de la empresa microbusera y de las autoridades para dar solución a esta problemática surgida.

De lo último se desprende que la seremi de Obras Públicas, Mirtha Meléndez, dijo a diario El Día que dialogó con la empresa Sacyr para realizar la entrega de la ruta D-43 el día de mañana. No obstante, la comunidad estará expectante a la espera de que el compromiso se cumpla, de lo contrario se podrían generar manifestaciones que vendrían complicar más la situación de colapso vial, que afecta a gran parte de los pobladores de Pan de Azúcar. 

Posibles manifestaciones

 La comunidad de Pan de Azúcar asegura estar dispuesta a movilizarse de no tener una solución a la brevedad ante el colapso vial existente, por lo cual, llamaron a las autoridades a adoptar acciones para acelerar los trabajos de mejoramiento de la vía y normalizar el tránsito vehicular.

Esto radica en que los pobladores han visto afectada su calidad de vida, tanto en el desplazamiento vehicular como en el acceso a transporte público, quienes insisten en que no deben asumir estos costos, ante una planificación poco adecuada de las obras.