Denuncian nuevas irregularidades por "loteos brujos" en la región

“El sueño de la casa propia se ha transformado en una pesadilla”, con esa expresión, Néstor Sánchez, vecino de la parcela 45 de Pan de Azúcar, se refirió a lo que están viviendo cerca de 50 familias que habitan ese lugar y que están a punto de perder sus casas, por una deuda que presenta la empresa que les vendió esos terrenos.

En el año 2014, la empresa Parcons propiedades adquirió la parcela 45 de Pan de Azúcar, terreno que subdividió en sitios, los que fueron puestos a la venta a un precio menor al que se ofrecía normalmente en el mercado.

Sin dudas,una oferta tentadora para cualquier familia que tiene el sueño de la casa propia en un lugar tranquilo en las afueras de la ciudad, más aún si se aseguraba el acceso a agua potable y electricidad. Sin embargo, con el paso del tiempo las irregularidades se fueron sucediendo una a una y hoy tienen al borde de perderlo todo a cerca de 100 personas que pagaron por sus terrenos, por el embargo de la parcela por deudas de la empresa.

“ Es lamentable lo que estamos viviendo, somos cerca de 50 familias las que estamos a punto de perderlo todo. Optamos por comprar estos terrenos seducidos por la oferta, pero lamentablemente nada de eso se cumplió, hoy nisiquiera tenemos nuestros títulos de dominio y estamos a punto de perder todo lo que hemos construido con tanto esfuerzo”, declaró Nestor Sánchez, vecino del lugar.

Sánchez además agrega que este no es el único problema con el que conviven, ya que no cuentan con agua potable y el servicio eléctrico es subvencionado por la empresa Parcons, lo que no les asegura un servicio de calidad.

Estos problemas llevaron a un grupo de vecinos a iniciar acciones legales en contra de la empresa que les vendió los terrenos.

Los abogados Ramiro Moya y Alejandro Navarro están asesorando a los afectados y entregaron la posición jurídica contra la empresa Parcons.

“Los querellados, prometían vender y transferir el dominio exclusivo de dichos sitios, y que esas ventas se encontraban totalmente saneadas”.

“Sin embargo, al realizarse las respectivas escrituras de venta, los afectados se encontraron con que no podían inscribir los sitios a su nombre, en primer lugar, porque resultaron ser Derechos y no un lote propiamente tal con inscripción propia, y en segundo lugar, porque los títulos de los terrenos, se encontraban con sendas prohibiciones, embargos e hipotecas en favor de terceras personas. Actualmente, las víctimas suman el total de 87 personas, las que han pagado entre 10 y 15 millones de pesos por cada sitio ilegal. Lo que da un total defraudado aproximado de más de 1.000.000.000.- (mil millones)”.