Quien se apoya en Jesús nunca fracasa, dice nuevo arzobispo

Cientos de fieles se hicieron presentes ayer en la catedral para recibir oficialmente a monseñor René Rebolledo.
Quien se apoya en Jesús nunca fracasa, dice nuevo arzobispo
Quien se apoya en Jesús nunca fracasa, dice nuevo arzobispo
domingo 09 de marzo de 2014

Enfatizando en el optimismo y en que un pastor de la Iglesia nunca debe rendirse, el nuevo arzobispo de La Serena René Rebolledo ofreció su primera homilía como jefe de la arquidiócesis.

Durante la misa efectuada ayer especialmente para recibirlo en la catedral, la nueva autoridad religiosa fue clara en el mensaje que quiso entregarle a los cientos de fieles que se congregaron en el lugar. “Quien se apoya en Jesucristo nunca fracasa”, precisó Rebolledo.

Y es que, según se desprende de las palabras del sucesor de monseñor Manuel Donoso, para continuar la labor de la comunidad católica en la zona sería esencial alejarse de la superficialidad cotidiana. Así lo remarcó durante la misa e invitó a los feligreses a cooperar en esta noble tarea.

“La invitación es a ‘remar hacia adentro y echar las redes’, ya que muchas veces para conseguir las cosas que nos proponemos tenemos que profundizar. Quiero aprovechar esta santa eucaristía para hablar acerca de este aspecto que también es palabra del Señor, y que debe orientar nuestro caminar, especialmente en este año de la misión territorial, remar hacia adentro es la invitación clara y precisa del Señor, remar ante el fracaso y la decepción, frente a las inevitables dificultades de la vida y ante los desafíos de todo orden, procuremos ir más allá, busquemos profundizar”, destacó monseñor Rebolledo.

Agregó que este “remar” a veces implica retroceder, pero valdría la pena por la recompensa. “Hay momentos en los que buscamos alejarnos de la superficialidad en los que hay que empezar de nuevo, pero hay que hacerlo, porque no se puede caer, por esto, en una falta de creatividad pastoral, en la comodidad o el desgano. Tengamos en cuenta que existe todo un horizonte por descubrir si remamos hacia adentro”, enfatizó.

A su vez, aprovechó la oportunidad de agradecer a Dios, a los presentes y también al arzobispo saliente Manuel Donoso. Y es que las palabras de quien dirigirá la arquidiócesis por los próximos años estuvieron cargadas de emotividad. “Cómo no agradecer a Dios, la guía permanente de nuestro pueblo santo, en todas las altitudes en Chile y también aquí en La Serena”, expresó un convencido Rebolledo. “Y también les agradezco a ustedes, por su presencia, sus parabienes y sus deseos”, agregó.

Resulta que Rebolledo ha visto con especial encanto ésta, la zona desde donde le tocó arribar desde Osorno para asumir el desafío. “Jesús peregrina en la región y ha contemplado su historia de fe, su gran devoción, su vitalidad, la entrega generosa de sus pastores y la presencia entusiasta de los jóvenes en todas sus comunidades, sus bellas tradiciones, sus bailes religiosos y su valiosa herencia cultural”, consignó.

En relación a monseñor Donoso, se unió al sentimiento de toda una región. Y es que reconoce en particular la labor que efectuó durante los 17 años como líder de la Iglesia en la zona luego que llegara en 1997. “Me sumo a la gratitud que tiene este pueblo con monseñor y con el obispo Luis Gleisner, contemplando la rica trayectoria pastoral que ha recorrido la arquidiócesis en el camino de estos dos grandes pastores que el Señor ha regalado a nuestra iglesia”, precisó.

UNA CEREMONIA COMO POCAS. Hace tiempo que la comunidad católica en La Serena no vivía un evento de tal magnitud y aquello fue valorado por todos. Y es que desde las 11 de la mañana el ambiente en el centro de la ciudad anunciaba que algo importante pasaría. Fue a esa hora cuando partió la procesión desde la Catedral de La Serena hasta la Iglesia La Merced, donde esperaban diversas autoridades religiosas, entre las que destacaba el cardenal Ricardo Ezzati, el arzobispo emérito Francisco Javier Errázuriz y, por supuesto, el gran protagonista de la jornada, monseñor René Rebolledo. Allí, luego de unas breves palabras de agradecimiento, retornaron a la catedral donde los esperaba monseñor Donoso, acompañado de cientos de fieles que no cupieron al interior de la catedral y siguieron la ceremonia desde afuera en donde se instaló una pantalla gigante, lo cual fue valorado por la comunidad.

FINAL Y COMIENZO. Al término de la misa había sentimientos encontrados. Por un lado todos manifestaron una pena por la partida de Donoso, pero tienen fe en que Rebolledo hará una buena labor. Así lo manifestó el propio cardenal Ezzati. “Sabemos que lo hará muy bien, tal como monseñor Donoso, conocemos sus capacidades y creemos en él, como todos acá”, indicó Ezzati.

En esa línea, el cardenal Errázuriz, al ser consultado acerca de si tenía algún consejo para Rebolledo, señaló que, “en este momento no existen consejos, sólo continuar en la línea que Dios ha trazado para nosotros y que él sabrá conducir muy bien”.

Por su parte, el nuevo arzobispo René Rebolledo agradeció particularmente “la deferencia” que ha tenido diario El Día “tanto en la despedida de Manuel, como en esta bienvenida que me han dado”, precisó.

En cuanto a sus primeras tareas en el cargo sostuvo que lo primero será conocer a la gente. “Quiero estar en terreno, conocer las localidades, a la gente, eso me gustaría, llegar a conocer a todas las comunidades”, concluyó el nuevo arzobispo de La Serena.

Monseñor Donoso le deseó suerte. Indicó que no tiene dudas de que lo hará bien y precisó que lo que sigue haciendo falta y que es tarea de todos es el tema de la regionalización en lo social. “Todo se hace en Santiago, todos los dineros van a parar a Santiago (...) Eso tenemos que cambiarlo entre todos nosotros”, aseveró.