EN MÁS DE 49 AÑOS

Fatal accidente en Los Vilos fue el primero en la historia de la Brigada Aeropolicial

La unidad realiza un trabajo cada vez más especializado en la Policía de Investigaciones (PDI), hoy como parte del Programa de Combate al Cultivo Ilícito “Plan Cannabis”. Una mezcla entre tecnología y experiencia, los han llevado a lograr grandes resultados en su arriesgada labor.
sábado 10 de febrero de 2024

El pasado miércoles 31 de enero, el trágico accidente de un equipo de la PDI, que realizaba labores en el marco del “Plan Cannabis” a bordo de un helicóptero institucional en Los Vilos, produjo una marca imborrable en la policía civil.

Luego de cargar combustible, el aeronave capotó y se estrelló contra el suelo, incendiándose en el aeródromo de Pichidangui.

Producto del siniestro, dos funcionarias resultaron fallecidas y otros tres oficiales terminaron con lesiones de diversa consideración, que aún los mantienen recibiendo atenciones en el Hospital de Carabineros.

El equipo, conformado por funcionarios de las brigadas Aeropolicial y Antinarcóticos Metropolitana, realizaban un importante despliegue, parte de los esfuerzos institucionales que durante enero lograron decomisar más de 47 mil plantas de cannabis en la región, dando un golpe de más de 100 mil millones de pesos al narcotráfico.

Según informaciones recabadas por El Día, el hecho, cuyas causas están siendo investigadas por la Fiscalía de Los Vilos, es el primer accidente registrado en los 49 años de existencia de la Brigada Aeropolicial en la PDI.

La Brigada Aeropolicial de la PDI se formó el 26 de septiembre de 1974, en principio como una forma de transporte para las diversas unidades de la policía a sus labores en terreno, pero adquiriendo gran importancia en estas décadas de servicio.

Con una capacitación especial como pilotos, los detectives de esta brigada cumplen una función clave en los esfuerzos que, cada año, la Policía de Investigaciones (PDI) desarrolla en el marco del combate contra el narcotráfico y el crimen organizado.

Los helicópteros de la PDI poseen una velocidad de crucero de 130 nudos, aproximadamente 230 kilómetros por hora, con una autonomía de combustible de tres horas y la capacidad de ascender hasta los 20 mil pies de altura, características que permiten a los equipos recorrer grandes extensiones de terreno y llegar a las plantaciones de cannabis que organizaciones criminales producen en los sectores cordilleranos de los valles.

Un trabajo que ha ido creciendo y especializándose, para seguir el ritmo e, incluso, anticiparse a las operaciones cada vez más preparadas de las bandas delictuales, que a lo largo del tiempo han ido tomando cada vez más terreno en zonas de difícil acceso.
Este despliegue se ha reforzado especialmente luego de la pandemia de covid-19, cuando se produjo un aumento considerable de la actividad delictiva en las plantaciones de cannabis. Actualmente operan en el marco del Programa de Combate al Cultivo Ilícito, en el que junto a otras unidades de la PDI llevan a cabo operativos más amplios y respaldados por investigaciones acuciosas, que buscan no sólo incautar plantas y detener delincuentes, sino desbaratar estos grupos criminales.

Pese a lo arriesgado del trabajo y la dificultad cada vez mayor en sectores cordilleranos, no habían tenido, hasta este año, ningún accidente que lamentar. Existen rigurosos protocolos para realizar sus planes de vuelo. Durante años, el profesionalismo y la seguridad a la hora de operar, se han alzado como los grandes valores de la brigada. 

Además, sus pilotos son experimentados. El comisario Mario Herrera, quien pilotaba el helicóptero siniestrado en Los Vilos, cuenta con 12 años de experiencia.

Hasta entonces, la Brigada Aeropolicial tenía cuatro helicópteros y un avión. La mencionada aeronave que operó en la zona, tenía cerca de 10 años de uso.

La investigación es desarrollada por la Fiscalía de Los Vilos, en coordinación con Carabineros y la Dirección de Aeronática Civil. 
Dentro de las diligencia, se ha tomado declaraciones de testigos, que dan cuenta del momento del accidente. Según los antecedentes, el equipo había hecho una recarga de 400 litros de combustible y cuando se encontraban a cerca de 15 pies de altura, el aeronave capotó.

En una de las declaraciones recabadas, el piloto comentó que sintieron un ruido en el motor del helicóptero instantes previos al accidente. De momento, las causas del mismo son desconocidas y los investigadores trabajar en dilucidar la cronología de los hechos.

Manuel Carvajal, fiscal de Los Vilos (S), indicó a El Día que se encuentran a la espera de los primeros informes que se encargaron a Carabineros y a la PDI, así como el análisis de las imágenes que han recopilado en medio de las indagatorias.

“Toda la información, esperamos revisarla junto a los peritajes que también hemos encargado y otras diligencias a la Dirección General de Aeronáutica Civil. Todo lo anterior con el objetivo de analizar la cantidad de antecedentes y reconstruir la secuencia de estos acontecimientos”, agregó.

Del mismo modo, Carvajal reiteró el llamado de la Fiscalía local de Los Vilos “a las personas que puedan tener registros de imágenes o videos, para que aporten dicha información a las policías o a la Fiscalía”.

De acuerdo a información recabada por El Día, los equipos de la PDI ya han retomado el trabajo del Plan Cannabis en la zona.