Tras asaltos y ataques: Guardias de seguridad gestionarán sindicato en la región

Durante el último tiempo, decenas de guardias de seguridad han padecido de graves asaltos y ataques en su lugar de trabajo.

Esta problemática ha afectado no solo su integridad física, sino también mental, por lo que se han visto en la obligación de formar un sindicato de trabajadores con el fin de acceder a más garantías y protección.

Margarita Caro Ríos,  vocera de los guardias de seguridad a nivel regional, comentó a El Día que actualmente están formando la directiva para posteriormente hacer el sindicato.

“Pretendemos tenerlo finiquitado durante el mes de octubre y una vez que lo tengamos, viajaremos a Santiago con una mesa de trabajo”, indicó Caro.

Desde la página de la Inspección del Trabajo, aseguran que para formar un sindicato es necesario contar con 25 miembros como mínimo y en el caso de los guardias de seguridad, estos deben acreditar el curso correspondiente en su área y contar con contrato de trabajo.

En este sentido, Margarita afirmó que para componer un sindicato este tiene que ser de inter empresa, es decir, “los integrantes deben pertenecer a toda la región y no a una sola empresa. Además debemos contar con un representante jurídico y una resolución sanitaria y una vez que se establezca todo ello, tendremos sindicato”, explicó.

Por otro lado, Margarita recalca que una de las razones que los llevó a gestionar un sindicato es por “la precaria seguridad con la que contamos. En algunas instalaciones solo trabaja una persona y en otros recintos ni siquiera hay cámaras de vigilancia o implementos de seguridad en las casetas. Últimamente muchos trabajadores han sufrido ataques y varios de ellos no tienen el curso y cuando ocurren accidentes nadie responde, porque no tienen seguros”.

El Día conversó con Marión Caballeros, una guardia que sufrió un violento asaltó en un condominio ubicado en la costanera Coquimbo, el día 22 de septiembre, alrededor de las 21:00 horas.

La mujer relató su cruda experiencia, señalando que un sujeto la golpeó por más de 20 minutos en el recinto donde trabajaba, luego que se le negara el paso a una residencia.

 “Forcejeó la ventana hasta que logró entrar, luego me empezó a golpear, me sacó afuera y me siguió pegando y arrastrando con una fuerza desmedida”.

La mujer contó que pudo ser rescatada por un grupo de ciclistas que se percató de la situación mientras transitaban por afuera del condominio.

Tras el ataque, la víctima hace un llamado a las empresas de seguridad a “asegurarse de que los lugares donde trabajen personas cumplan con condiciones mínimas, por ejemplo que las casetas tengan protección y que los botones de pánico estén instalados en varios puntos”, cerró.