Agricultores estiman que mermas en las exportaciones podrían superar el 30%

Los mayores efectos se reflejan en la producción de uva de mesa, principal envío local. De no haber un repunte en las lluvias, advierten que la situación se tornará aún más grave
Agricultores estiman que mermas en las exportaciones podrían superar el 30%
Agricultores estiman que mermas en las exportaciones podrían superar el 30%
jueves 27 de febrero de 2014

Dada la extensa sequía que afecta a la región por ya más de 8 años, a inicios de la temporada 2013-2014 los agricultores habían manifestado que las pérdidas en los envíos al exterior, sobre todo de uva de mesa, principal producto exportador local, se verían acentuadas, puesto que la falta de agua impediría el riego en gran cantidad de predios.

Y al parecer, desafortunadamente estas proyecciones se estarían cumpliendo, puesto que, en un análisis preliminar, los productores estiman que las mermas podrían superar incluso el 30%, llegando esta situación a agravarse en sectores donde la escasez hídrica presenta mayor complejidad.

Humberto Aguirre, agricultor de Limarí, cuenta que esta temporada han trabajado en muy malas condiciones, porque la cuota de agua que recibieron este año alcanzó sólo a un 10% de lo que estaban acostumbrados a tener. “Hasta el año antepasado nos dieron 3.500 metros cúbicos por acción y este año nos dieron 350 metros cúbicos por acción, de manera que el riego que le pudimos dar a las plantas fue muy poco, pudiendo regar sólo el 30% de lo que teníamos plantado. Hemos perdido muchas plantaciones que tuvimos que cortar, estamos muy mal”.

En este sentido, señala que “nosotros no vamos a llegar a producir más del 30% de lo que producimos en tiempos normales”. En un año normal, dice, llegaba a facturar sobre 1 millón de dólares al año “y este año estaríamos facturando cerca de 300 mil dólares”.

Respecto a si los precios en el mercado internacional y el alza del precio del dólar podrían amortiguar en parte esta caída, Aguirre señala que aún no pueden saberlo pues la producción es más bien tardía y que recién a finales de la temporada podrán tener un panorama más claro, “pero las pérdidas están”, agrega.

“Desgraciadamente, de no mediar un repunte en las lluvias, el próximo año ya estaríamos llegando a un fin de la agricultura en esta zona”, enfatiza.

A juicio del productor, lo que debería ocurrir en esta región es un cambio más profundo de las políticas públicas respecto del agua. “Carecemos de una política de riego, la Comisión Nacional de Riego, que es la autoridad que regula, no tiene una política especial para esta zona, en que se genera una agricultura de desierto. En esta región, además de la infraestructura, deberíamos tener una política que asegure una mayor inversión y un manejo del agua diferente a lo que se está realizando”, sostiene.

Alfonso Artigues, también agricultor de Limarí, ratifica que “la producción ha bajado una barbaridad”. En estimaciones preliminares, dice, podría superar el 20%. Eso aún no se sabe a ciencia cierta, explica, pues hay muchos parrones que todavía están con fruta, “pero en el último mes se quedaron sin agua y esas uvas no se han podido cosechar, por lo que podría aumentar”.

Eso, aclara, sólo en el tema de la vid, porque en paltas y cítricos son muchas las hectáreas que se han arrancado “y ahí podría haber pérdidas mucho más considerables”, considerando que aún no inician su producción.

A su parecer, “si este año no llueve temprano va a haber muchas producciones que se van a perder, porque los tranques van a quedar prácticamente todos secos ahora en abril”.

Vuelve a reiterar que aún no se puede hablar en cifras específicas, pero que “definitivamente el daño es muy grande. Yo cuento con pozos e infraestructura de riego, pero he conversado con otros agricultores que la están pasando mal”.

En cuanto a los precios internacionales, reconoce que existe información de que han sido muy buenos, pero que “en estos momentos las uvas se están recién vendiendo en los mercados”. En el caso de Estados Unidos, se mantendrían muy semejantes a los del año pasado “donde estuvieron buenos”. En el caso de Asia, recién estarían llegando las primeras producciones, así que no tienen un panorama claro todavía.

Cabe destacar que este lunes el puerto de Coquimbo informó sobre el alza en el movimiento de fruta de exportación que registró durante esta temporada. Para Artigues, estas cifras obedecen simplemente a la llegada de barcos desde otras terminales debido al paro portuario, “pero no reflejan lo que se vive en la zona”, aduce.

El Día consultó además en uno de los frigoríficos más grandes de la región, donde señalaron que, dado que aún no culmina la temporada, aún no manejan datos específicos de la producción durante el periodo, pero que, sin embargo, estiman que las bajas podrían bordear entre un 35% y un 40% en la producción de uva.