Mujeres del Limarí aprenden a fabricar hornos solares
Preparar un almuerzo aprovechando las bondades del sol era hasta hace un tiempo algo impensado para un grupo de mujeres de las comunas de Río Hurtado y Punitaqui. Estaban acostumbradas al uso de la leña y al gas licuado en sus cocinas, con el gran gasto que eso implica.
Pero hoy la energía solar les está brindando una nueva oportunidad: Gracias al Fondo de Acceso Energético (FAE) del Ministerio de Energía, 120 personas, la mayoría dueñas de casa, recibirán capacitación para la confección de hornos solares y secadores de fruta, lo que les permitirá el ahorro de recursos y una posibilidad de emprender, a través de la generación de productos típicos que tengan el sello de la sustentabilidad.
Aprovechar los recursos naturales
Los beneficios comienzan a notarse. Mujeres de las localidades de Fundina y Hurtado, se levantan muy temprano para esperar la micro que las traslada hacia Tabaqueros, en la sede de la Agrupación de Artesanos, donde reciben los conocimientos para fabricar estos utensilios.
Delfina Carvajal, una de las beneficiadas con este proyecto, es de Samo Alto. Considera que es un gran adelanto, porque “con el horno solar vamos a poder ahorrar dinero y a generar productos orgánicos. Nosotros tenemos todos los días sol y gratis. La idea es aprovecharlo, mientras más personas accedan a esto más beneficiada será la comuna”.
Para Rafael Bahamondes, presidente de la Corporación Cultural Héctor Barreto – entidad que aporta los conocimientos y la innovación tecnológica- el reemplazo del uso de la leña generará “el aporte de una nueva mirada más refrescante para subsistir en la zona, tiene gran importancia, porque estas comunidades necesitan un apoyo en cómo resolver sus desafíos ambientales”.
Importante beneficio ambiental
Por su parte, el Seremi de Energía, Marcelo Salazar, subrayó que la impronta de la Seremía y del Ministerio es desarrollar estrategias para la utilización de los recursos energéticos propios. “Este proyecto lo que busca es democratizar la energía, mediante la capacitación, educación y la auto construcción de equipos para ser usados por las familias rurales”, señaló. Junto con ello, el Seremi también mencionó que gracias a estos utensilios las dueñas de casa ahorrarán el consumo de gas y de leña, “con lo cual no aumentan la desertificación, disminuyen el impacto hacia la vegetación desértica y mejoran la gestión ambiental de los territorios rurales”.
