La biblioteca que se niega a morir

El recinto educacional de Montegrande lleva años sufriendo por la falta de recursos económicos, pero la gente se ha empeñado en sacarlo adelante
La biblioteca que se niega a morir
La biblioteca que se niega a morir
martes 22 de octubre de 2013

“Trabajemos todos juntos por la cultura, por la civilización y, sobre todo, por la paz” son las palabras emitidas por Gabriela Mistral que han servido de guía para la gestión de la Biblioteca Pública Nº387, ubicada en la localidad de Monte Grande.

Bajo la administración de la Fundación Monte Gabriela, dicho recinto, por más de diez años, ha contribuido en la lectura, la cultura y generación de espacios de esparcimiento para la comunidad de Paihuano. Sin embargo, ante la falta de recursos que permitieran solventar los gastos propios de una entidad de estas características, la biblioteca de Montegrande se vio obligada a cerrar sus puertas el 1 de agosto de este año.
Esto luego de que, en primera instancia, Bienes Nacionales les solicitara el desalojo de la propiedad que alberga al recinto con motivo de desarrollar nuevos proyectos, pero, al cabo de un tiempo, la entidad desistió de dicho plan y abrió las postulaciones para que otras empresas pudieran hacerse cargo de la administración de la biblioteca, ante lo cual, la Fundación Monte Gabriela se negó.

LA CIFRA

1

de agosto de este año, la Biblioteca Pública Monte Gabriela decidió cerrar sus puertas.

 

Luego de permanecer cerrada por más de dos meses, la Biblioteca de Montegrande reabrió sus puertas durante la jornada de ayer, aunque los problemas económicos no se han solucionado.
Según explicó María Soledad García-Huidobro, presidenta y fundadora de Monte Gabriela, “la biblioteca abrió gracias al importante apoyo de los vecinos y voluntarios de Montegrande, quienes amablemente se ofrecieron para sacar adelante este recinto que tanto entrega a la comunidad”, y agregó que “aún estamos en búsqueda de financiamiento. Estamos esperando una respuesta del Gobierno”, agregó García-Huidobro.
La presidenta de la fundación destacó que la razón que llevó a la reapertura del recinto se debería a la urgencia de la Dibam en que Monte Gabriela restablecería sus servicios bibliotecarios. “Si no abríamos podíamos perder el convenio que tenemos con la Dibam”, precisó María Soledad.
La Biblioteca Pública Monte Gabriela está funcionando en el mismo edificio que la ha acogido desde el 2008 y sus servicios y horarios de atención permanecen igual que antes. García-Huidobro destacó que también se re impartirán los talleres y dijo que “por lo pronto estamos planificando dichos cursos. En la brevedad daremos a conocer cuándo se retomarán”.
En cuanto al desafío de prestar los servicios bibliotecarios sólo con la ayuda de vecinos y voluntarios, la fundadora de la Fundación Monte Gabriela enfatizó en que “no estamos dispuestos a dejar nuestro trabajo. Esta biblioteca cumple una importante labor social ya que, por una parte, permite realizar investigaciones sobre Gabriela Mistral y, lo más importante, contribuye a la educación de los niños de la comunidad”. Asimismo, María Soledad destacó que “estamos muy contentos por volver a abrir las puertas de la biblioteca. La gente nos pidió en varias ocasiones que lo hiciéramos”.