Jubilados cuentan su verdad sobre las AFP en La Serena

Luis López Salazar tiene 72 años. Durante décadas se desempeñó como un pequeño empresario y reconoce que tuvo muchas oportunidades en la vida, lo que sin duda agradece. Sin embargo, su actual pensión llega a los $250 mil.  Está inquieto, pues es una realidad que alcanza todos los aspectos de su diario vivir y, cree, afectará a las futuras generaciones. “Después de los 65 años todo se dificulta. Incluso, hay jubilados que apenas viven con $156 mil o menos. Sólo les alcanza para sobrevivir y esperar la muerte, además de que el Estado poco y nada hace por apoyar al adulto mayor”, reconoce.

Fue realmente fuerte para él escuchar los dichos del llamado “padre de las AFP”, José Piñera, quien en medios televisivos afirmó anoche que “una persona, si cotiza durante 30 años, puede perfectamente llegar a llegar a pensionarse con $650 mil.

Luis López Salazar (72 años)

Don Luis asegura que esto no es una realidad. “Quizás se aventuró en dar cifras, pero la realidad no es esa. Yo tenía una pequeña industria y nos fuimos a una AFP porque fue una imposición durante el gobierno militar. Quizás a mí no me perjudicó en demasía, porque yo fui empresario, pero sin embargo tengo que seguir trabajando. Gasto mucho en medicamentos. Así, no hay bolsillo que aguante. En todo caso, si se pudiera vivir con $650 mil como dice el señor Piñera, podría ser prudente, pero no es la tónica”, subrayó.

Es la realidad que se repite y se repite. Incluso de forma más precaria. Víctor Zamora Guzmán, también de 72 años, entre comillas “disfruta” de sus años dorados. Sin embargo, todo se ha dificultado con los $120 mil que recibe como pensión. “Durante años, fui independiente pero durante algunos años no impuse, porque al prinicipio no se permitía. Luego se pudo, pero luego comencé a trabajar apatronado”.

Víctor Zamora (72 años)

Él, es claro. “Siento que me estafaron. Me gustaría que existiera algún beneficio de préstamo, por ejemplo. Cuando la rentabilidad baja, somos nosotros quienes pagamos las consecuencias”, considera este trabajador, quien sostiene que “debe seguir trabajando para susbsistir, en una importante empresa de abarrotes y de construcción, como asistente de ventas. Sin embargo, tengo que restringirme pero al máximo.  Hay que tomar poca locomoción, caminar y comprar barato. Hace unos días, tuve que incluso gastarme 10 mil pesos en un remedio. Así, no hay bolsillo que aguante”, sostuvo.

La realidad de Gustavo Santander, dirigente vecinal de La Serena Sur, es distinta. Trabajó durante largos años en la minería, lo que le trajo buenos réditos en su jubilación. Sin embargo, es consciente de la realidad de otras personas “Creo que es muy importante apuntar a ser más generosos y reclamar en favor de quienes tienen necesidades que surgen a partir de un sistema injusto. Porque si el sistema de AFP fuera tan bueno, ¿cómo se explican las movilizaciones? Si José Piñera entrega esta información es porque tiene algún interés al respecto, creo yo. Yo, de hecho, participaré en los cabildos comunales, para expresar mi molestia”, dijo resuelto.

Gustavo Santander también vive esta realidad.

A estas críticas, palpadas de la realidad misma, se sumó un amigo de don Gustavo. David Orlando está pensionado desde hace más de 20 años, con una cifra que hoy llega apenas a los $280 mil. “Mi mujer está enferma. Perdió la memoria, tengo que comprarle pañales; a veces yo también me enfermo. En los hospitales hay que esperar horas, y si uno va a un especialista, todo se complica. Por eso yo creo, que llegar a los 650 mil pesos que indica Piñera, es muy difícil. Cuando los futuros jóvenes se jubilen, recibirán miserias”.

David Orlando no la pasa nada de bien como jubilado.

Miguel  Moreno, quien trabaja con su puesto de confites en la Plaza de Armas de La Serena, con sus 66 años, recibe una pensión cerca a los $140 mil. “Mi AFP me paga sólo $80 mil mensuales, lo que se complementa con una cantidad que me paga el gobierno. Lo demás, lo genero trabajando”, afirmó, mientras atiende a sus clientes. A diario tiene que levantarse e ir hasta su lugar de trabajo sin importar el frío o el calor.

Miguel Moreno tiene que seguir trabajando para subsistir

Sin embargo, tiene una visión distinta respecto a la realidad actual de las pensiones en Chile. “Se decía que iban a funcionar bajo un régimen de capitalismo popular, donde cada usuario del sistema iba a formar parte de las utilidades que iban a generar. Creo que esto demuestra la mala administración de los gobiernos de la Concertación en esta materia. La clase política es la que ha usurpado el dinero a todos los chilenos”, asegura.

REALIDAD QUE LLAMA A LA TOMA DE CONCIENCIA.

Juan Dabed es un joven que ha participado activamente en las marchas contra las AFP en La Serena. Si bien no se trata de un problema propio de su generación, sí ha tomado plena conciencia de la importancia de esta temática, teniendo en cuenta el futuro que a él y a muchos chilenos le espera.

Por supuesto, está lejos de compartir los dichos de José Piñera, en cuanto a la realidad que hoy viven millones de jubilados en el país. “Lo que presenta José Piñera es una realidad que no cuadra con el de la mayoría. Si existiese esa persona, que jubila con $650 mil, habría que ver qué tramo de sueldo ganó. Esto obedece más a una retórica que a una realidad. Incluso, el propio gerente de la Asociación de AFP esbozó que las pensiones no superan los $220 mil”, recalcó el representante ciudadano, quien recordó que incluso las pensiones promedio llegan a $156 mil.

Dabed incluso fue más allá, ironizando respecto a la situación. “Quizás José Piñera se refirió las pensiones de los gerentes de las AFP o de un grupo que llega a cerca del 5% de la población. No me sorprende esa prepotencia, porque es el ideólogo del sistema e incluso del Plan Laboral, llegando a transformar a la población en una suerte de clientela".    

DATOS QUE RESPALDAN LA REALIDAD

La Comisión Bravo, convocada por el Gobierno para evaluar el actual estado del sistema, no se escapa demasiado de la radiografía que Diario El Día efectuó en terreno. El 50% de los jubilados en la actualidad recibe una pensión igual o inferior a $82.650, lo que equivale a menos de la tercera parte del salario mínimo.

Asimismo, la mitad de las mujeres obtienen una pensión igual o inferior a $42.561, cifra 2,6 veces menor a la que recibe la mitad de los hombres, que es igual o inferior a $112.333.

El notable distanciamiento entre las pensiones de mujeres y hombres, según la Comisión Bravo, se explicaría por la diferencia en la edad de jubilación.

Otro factor que tiene un fuerte impacto son las denominadas lagunas previsionales, es decir, el tiempo en que no se ahorra para la jubilación. En promedio, ya sea por condiciones laborales precarias o bajos salarios, los trabajadores cotizan sólo la mitad del tiempo que ejercen.

En el caso de las mujeres, la Comisión establece que la mitad de ellas cotiza sólo el 12,8% de su etapa laboral.

En la actualidad, según la Superintendencia de AFP, el 50% de los hombres recibe lo mismo o menos que el 60% de su sueldo. Por ejemplo, la mitad de los hombres cuyo sueldo promedio en los últimos 10 años fue $417.900, en el mejor de los casos alcanzan una pensión de $250.740.

Como es de esperarse, los bajos ingresos se acentúan para las mujeres. Con un sueldo promedio de $280.900, para la mitad de ellas la pensión no superará los $87.079.