Hanne Utreras: "El Estado nos paga para dirigir y llevar a cabo los planes y proyectos"

Con la orden perentoria que se suspendían las clases en cinco comunas de la Región de Coquimbo, cuando se habían enviado informaciones contradictorias, la intendenta Hanne Utreras dejaba en claro quién lideraba la emergencia por las lluvias y el aluvión en el valle. Esto luego que en el primer día, la vocería, sobre todo a nivel nacional, se había concentrado en Américo Giovine, gobernador de Elqui. Pero la propia autoridad, en entrevista con diario El Día, aclaró que eso ocurrió a consecuencias de su enfermedad.

Durante el diálogo estrenó un discurso para esta segunda etapa de gestión. Lo resumió en una frase. Que ella aprendía rápido. Se refería a que en este primer año leyó con atención que debía reforzar su lado político. En todo caso, insistió en que no se hace cargo de rumores y sobre todo que tiene claro que su vinculación en la intendencia depende exclusivamente de la decisión de la Presidenta Bachelet.

Se estima que este enfoque es concordante con el balance que habría hecho su equipo cercano. Que pese a los planteamientos públicos, no fue marginada del cargo, cuando la presión era evidente. En su fuero interno el haber pasado el año sería un triunfo personal y su entorno está consciente de que cualquier cambio que se efectúe de aquí en adelante sería en medio de una reestructuración general ante la caída libre en la popularidad de la Presidenta y su gobierno.

Es por ello que califica el primer año como intenso. “De mucha planificación. Un año de hacernos cargos de la emergencia, pero a la vez también pensar en el desarrollo. Un año de trabajar en equipo como gobierno regional y con nuestros consejeros regionales y con los 15 alcaldes y parlamentarios y con las organizaciones sociales, como agricultores, empresarios”.

Lo grafica con el conductor que colocó el acelerador a fondo. “Hoy día la curva va ascendente y eso es importante por cómo se tomó el gobierno el 11 de marzo de 2014. Con una sequía histórica y donde todo venía a la baja y gracias a que reactivamos la economía, a través de la inversión pública, hemos logrado mantener las cifras de desocupación y así y todo estamos punteando con un 8,3 % . Entonces, el escenario hubiese sido mucho más complejo si no hubiéramos adoptado las precauciones y cuando hablo de reactivación económica es porque hemos logrado colocar más de 1.200 millones de dólares y que se está trabajando con empresas”.

-A nivel nacional, los casos Penta y Caval evitaron hacer una celebración del primer año como correspondía, ¿a nivel regional tampoco lo pudo hacer?
“En esto hay un esfuerzo grande y había que trabajar con la situación en la que nos encontrábamos, pero en esto traigo una historia y por eso ha sido un orgullo ser intendenta de esta región respecto a que todo con lo que partimos hace seis o siete u ocho años se hizo desde la planificación que tanto peleo”.

-¿En lo personal tiene una obsesión con la planificación?
“Es que la planificación es la que nos da una visión de región, la que nos raya la cancha para dónde tenemos que ir y cómo lo tenemos que hacer. Además se planifica el territorio para que no nos ocurran experiencias complejas, por ejemplo, con la emergencia que estamos viviendo hoy en el norte”.
En la suma final, sostiene que no se pueden desconocer los positivos índices que ha tenido la región. “Y en materia de cumplimiento para mí ha sido un orgullo tener uno de los mejores cumplimientos a nivel nacional. Tanto en presupuesto, como en los fondos del FNDR, además de todos los dineros que se han inyectado sectorialmente y esto obedece a una propuesta estratégica de desarrollo, incluyendo las obras de emergencias como iniciativas como el embalse de Valle Hermoso, donde bordearemos los 50 mil millones de pesos y que es necesaria. Este es un trabajo en equipo y que la Presidenta ha valorado mucho”.

-¿Con qué iniciativas se encontró ahora como intendenta y que había liderado como seremi de Obras Públicas?

“Con todo lo que es inversión vial, borde costero y el embalse Valle Hermoso y en ese tiempo, gracias a nuestros consejeros regionales que aprobaron los recursos para realizar los estudios, hoy tendremos embalse, de lo contrario no hubiera ocurrido. Pero la decisión política se podría haber tomado hace 4 años. He dicho que no podemos permitir que esta región se seque, pero para eso se tienen que ir apalancando con otros proyectos, pero estoy optimista”.

-A raíz de lo ocurrido en Chañaral y Copiapó, ¿revisará la política de construcción cerca del borde del río Elqui?

“Nosotros tenemos las quebradas bien tratadas, además que son las obras más caras, pero que no se ven. Hacer enrocado y gaviones es elevado en materia económica, pero lo hemos podido hacer. Además, hay que ser responsable, la gente sabe que existen las quebradas y que en algún momento llovería y hay que estar preparado”.

-Pero, una cosa es que las familias levanten una mediagua y lo otro es que las constructoras edifiquen cerca del río como está ocurriendo en el sector de La Serena…

“Ahí hay un tema del plan regulador comunal y obviamente todos esos sectores fueron aprobados y el Plan Regulador lo permite. Aquí no hay nada que no esté permitido”.

-El conflicto es que hay quienes insisten que en algún momento el río volverá a crecer como ocurría antiguamente…

“Lo que no se puede hacer es invadir la caja de los caudales. La caja del río no se puede invadir porque en algún momento el río saldrá por cualquier parte y buscará su salida. Hubo una falencia en Vicuña que se detectó en la quebrada Leiva que divide Vicuña, donde existió un problema de mantener el roquerío. En eso tenemos que ser bastante respetuoso y falta más fiscalización, hay empresas que tiran los bolones y desechos, pero cuando llueve cae con una fuerza estrepitosa y ahí la quebrada hizo lo suyo. Ahí no se hizo el colector secundario e inundó una serie de casas, existiendo un problema de diseño bastante identificado”.

-¿A raíz de la experiencia del norte acelerará las obras de infraestructura para evitar emergencias en la zona?

“Totalmente, hay que aprender de los distintos episodios. En un momento hay que adoptar definiciones políticas y tomar decisiones. Así como se definió construir el puente de Tongoy, también se hará el de Altovalsol, porque son obras muy caras”.

No a los rumores

-¿Ha tenido costos personales el haber asumido el cargo de intendenta?

“Sin duda te cambia la vida, sobre todo en la exigencia en los tiempos. Tengo un hijo de 18 años que se ha criado conmigo en el mundo público y él es mi soporte familiar. Pero ahora el desafío está en preocuparse de la región y mientras tenga la confianza de la Presidenta Bachelet como hasta el día de hoy, lo seguiré haciendo”.

-¿En su análisis más político se convenció en este año que había personas que no la querían en el cargo?

“A ver, lo planteo de otra manera, hay mucha gente que quería este cargo, es apetecido en materia política y para poder definir muchas cosas. Cuando me lo propone la Presidenta lo veo como una oportunidad para la región”.

-¿Pero, en lo personal, qué sentía cuando en los medios y en las redes sociales se planteaba que el ajuste y el cambio venían?

“Me lo han preguntado muchas veces, pero la respuesta siempre es la misma. La gente lo que espera de mí es que no ande haciendo comentarios ni me haga ecos de estos rumores”.

-¿Le complica escucharlos constantemente?

“Es que a esta altura ya no, porque pasamos un año y tenemos una región con números positivos. Ahora, si alguien quiere opinar fantástico, pero la gente por la cual estoy trabajando necesita otra cosa”.

-¿No era más fácil establecer relaciones fluidas con los senadores Jorge Pizarro y Adriana Muñoz desde el principio para dejar tranquilo al mundo parlamentario?

“Mira, a nivel parlamentario he tenido la relación que corresponde. Por ejemplo, en el plan hídrico 2015-2025 lo hemos hecho con todos los parlamentarios porque pese a las diferencias que podemos tener, en la suma estamos en sintonía. Hay un tema más bien político, pero es cosa de mirar los números, los comentarios no llevan a nada”.

-¿Es cierto que usted no le contesta el teléfono a los senadores?

“No, cómo se te ocurre, jamás, mi teléfono es público y se le contesta a todos y si no se le contesta en el momento se le devuelve el llamado. Además que el registro es público. Jamás ( lo remarca varias veces), además que tengo un equipo político y de gabinete donde ellos tienen representación de los partidos políticos, por lo tanto tienen vinculación con nuestros parlamentarios.

Entonces, no es solamente Hanne Utreras, es un equipo de gobierno el que tiene que trabajar. Cuando es un ataque personal, la verdad es que me da exactamente lo mismo porque estoy trabajando y eso es lo que necesita la gente de nosotros”.

-¿Cree que esperaban una intendenta que pudiese ser ‘manejable’?

“Eso tienes que preguntárselos a ellos (quienes la criticaban), pero al día siguiente que la Presidenta me nomina, estaba trabajando con la Nueva Mayoría en pleno. Aquí la gente tiene que venir a trabajar y hoy día el equipo de trabajo está fortalecido. Además que nosotros respondemos a un programa de Gobierno. El Estado no nos contrata para responder singularidades o particularidades, sino que nos paga para poder dirigir y llevar a cabo los planes y proyectos”.

-En medio del aluvión en Vicuña llamó la atención que las vocerías las efectuaba el gobernador de Elqui y no usted y nuevamente surgían las especulaciones…

“En este caso la vocería la hizo el intendente (S) porque yo estaba enferma, también me enfermo. Pero, el miércoles (un día después) estaba en la Oremi dirigiendo el COE y el tema estaba complicado y había que tomar decisiones. Por ejemplo, el suspender las clases. Tomar la decisión de juntarnos con la empresa sanitaria y conversar los temas”.

-¿Cómo se gobierna la región en medio de la baja en las encuestas de la propia Presidenta?

“Con trabajo, están pasando cosas complicadas a nivel nacional. Estamos viviendo un antes y después en lo político (caso Penta y Caval), son remezones, pero también sirve de lección. Insisto, la señora Rosita lo único que está esperando es que el camión aljibe le llegue y esa gente nos necesita en la región trabajando. Muchas veces no está informada del acontecer y yo estoy para llevarle el agua a esta señora. En eso no me pierdo, ni me pierdo en el tema de los rumores”.

-Cuándo se hablaba de una debilidad política, ¿le hubiese gustado ser más política?

“Tengo un don es que aprendo bastante rápido, entonces hay un tema que hay que combinar para hacer mejor el trabajo”.