Tiene 26 años, próximo a ser papá, se encuentra estudiando y se siente como cuando estaba partiendo en el sueño de convertirse en un futbolista profesional. La vida, un tanto alejada del balompié, aunque con unas tremendas ganas de volver, Alan Muñoz Tapia, la desarrolla con un equipo multidiciplinario de profesionales, ya que su meta es volver al fútbol competitivo en el 2023.
En el sector de la Scuola Italiana, lo sorprendimos trabajando a la par con el preparador físico de Alto Rendimiento, Carlos Ascuy, quien destaca que Alan ha mostrado una gran recuperación, en parte por su rol de futbolista de alta competencia, con Alan la relación de profe-jugador comenzó hace unos meses. Esta recién con los desplazamientos, el traumatólogo nos da los vamos para adicionar dificultad y progresión a la recuperación”, puntualiza.
En efecto, Alan sufrió una rotura de ligamento cruzado anterior y menisco, que debiera tardar unos nueve meses en recuperar, “ha comenzado con el trote, carga y fortalecimiento y en unas semanas más vendrán los cambios de dirección”, agrega el profesional, quien también participó hace unos años en la recuperación de Jovany Campusano.
CONCEPCIÓN
“Estaba de vacaciones, había terminado contrato con Concepción y en el verano 2022 me lesioné, me operé el 11 de enero y ahora ya cumplo seis meses, todo es progresivo, no me quiero apurar, hay que seguir la pauta del kinesiólogo Sebastián Tabilo y el profe Carlos Ascuy, y el nutricionista deportivo Ignacio González, me estoy preparando a full para ver si el próximo año se puede dar una posibilidad de retornar al fútbol”, comenta el deportista.
Está consciente que el camino es complicado, “todavía me queda, si quiero volver al 100 y esperar para el 2023 si se da una nueva posibilidad, comenzar quizás de abajo, la idea es volver a jugar”, recalca el futuro papá, quien también trabaja con chicos de la academia River Plate.
AGRADECIMIENTOS
No fue fácil costear la operación. Para ello los amigos se portaron muy bien, “estoy muy agradecido de quienes me apoyaron con un campeonato para costear los gastos de la operación, salió súper lindo, con gente del Unión Minas, hicimos completadas, rifas, me ayudaron con camisetas algunos amigos, siempre buscando generar recursos, ya que esto salió pesado”, replica en un momento que espera solamente se convierta en una anécdota.
A los 23 años Alan salió de CD La Serena. Se fue a Lautaro de Buín y Deportes Concepción, por lo que no solo anhela volver a la actividad, “sería lindo volver a jugar, es difícil, pero uno siempre está con la ilusión de volver al club que le da las herramientas para formarse, encantado volvería al club de mis amores”, recordando esos momentos cuando vestía y con orgullo la camiseta del elenco serenense.